La celebración incluye actos de larga tradición como la elección de alcaldesa por un día o las carreras de rosca.
Vestida con el traje regional y luciendo el bastón de mando, la alcaldesa por un día de Grañén, Roxana Petruta Pop, ha sido la encargada de dar la salida de las tradicionales carreras de rosca, que han tenido lugar en varias calles del casco urbano y que han contado con la animación de la charanga Osca. Aunque al final ha habido reparto, las mujeres han pugnado de dos en dos por el delicioso dulce.
Antes, ha habido misa cantada y reparto de bollos bendecidos. Y, por delante, todavía resta comida, café concierto y baile. La festividad se vive como una jornada vinculada a la devoción, la convivencia y el ocio.
Ahora bien, y tal y como muestran los actos conservados, todavía se puede observar el carácter reivindicativo de su origen. De hecho, estaba pensada para que las mujeres pudieran por un día adquirir roles reservados al hombre como el acceso a la política o la participación en actividades deportivas.
En Curbe, núcleo de población, poblado con familias procedentes de Grañén, también se realizan las carreras de rosca.
